La actividad ecuestre se ha encontrado presente durante las distintas etapas de la historia de Chile. El huaso, personaje característico de nuestra cultura, se desarrolló con el caballo como su fiel compañero y principal medio de transporte, vinculándose con él a través de distintos aperos. La montura, principal apero para el manejo del caballo, llega a nuestro país en los tiempos de la Conquista y se desarrolla de manera particular en el territorio chileno.
Sin embargo, con el paso del tiempo la montura chilena y el oficio talabartero que la elabora se han visto cada vez más olvidados, y son casi desconocidos para las nuevas generaciones. A partir de esto nace la necesidad de contribuir a la preservación del oficio talabartero y de la montura chilena como parte de nuestro patrimonio cultural.
A través del uso del diseño gráfico, este proyecto busca evidenciar los elementos más importantes y característicos de la montura chilena, llevándolos a un lenguaje visual estéticamente agradable y comprensible. De esta forma, se espera lograr una sensibilización por parte del público en relación a la temática, así como también generar un aporte al reconocimiento de la artesanía como parte importante del patrimonio cultural chileno.